Un violento episodio ocurrido en la noche del viernes en el Barrio INTA derivó en un herido de gravedad, disturbios vecinales y la detención del conductor de un vehículo que, además de protagonizar un choque frontal, atacó a un efectivo dentro de la propia dependencia policial.
El hecho ocurrió alrededor de las 23:20, cuando personal de la Subcomisaría INTa escuchó un fuerte impacto en la vía pública. Al salir, se encontraron con un automóvil que circulaba por calle Daleoso de oeste a este y una motocicleta que lo hacía en sentido contrario. Ambos rodados chocaron de frente y el motociclista salió despedido, sufriendo una fractura expuesta en la pierna izquierda, caída sobre la cinta asfáltica.
El siniestro rápidamente generó la preocupación y la indignación de los vecinos, quienes comenzaron a rodear al conductor del vehículo entre insultos y amenazas, con intención de agredirlo. Para evitar un linchamiento, los efectivos decidieron trasladarlo caminando hasta la Subcomisaría, donde fue resguardado en la sala de atención al público.
Lejos de calmarse, la situación se agravó: un grupo de vecinos se concentró frente al destacamento exigiendo que el conductor saliera para “hacer justicia por mano propia”. Comenzaron a arrojar piedras contra el edificio, lo que generó un escenario de extrema tensión.
Cuando el personal intentaba contener a los manifestantes, se produjo un hecho inesperado dentro de la dependencia. El conductor involucrado en el choque —visiblemente intoxicado, según indicaron fuentes policiales— atacó por la espalda al oficial que se encontraba de guardia, tomándolo del cuello e intentando arrebatarle el arma reglamentaria mientras vociferaba amenazas como: “Voy a matar a todos los de afuera”. Tras un forcejeo que incluyó golpes y daños en un vidrio y una pared interna, el policía logró reducirlo y colocarlo en esposas.
Afuera, la tensión continuaba en aumento. Móviles policiales de distintas dependencias llegaron en apoyo, pero también fueron recibidos con pedradas. Para dispersar a los agresores y restablecer el orden, se utilizó escopetería con cartuchería anti-tumulto (AT), logrando finalmente replegar al grupo.
Con la zona asegurada, intervino Policía Científica, que realizó fotografías, planimetría del siniestro y documentación de los daños ocasionados tanto en el edificio policial como en las lesiones del efectivo y del aprehendido. Ambos vehículos fueron secuestrados y trasladados al Puesto 824.
Personal de APSV acudió para realizar el test de alcoholemia, pero el conductor se negó. Fue llevado al hospital para constatar sus heridas y luego trasladado a la Comisaría Distrito Primera, donde quedó detenido a la espera de la audiencia de control de detención.
El caso se investiga bajo múltiples figuras penales: lesiones graves en accidente de tránsito, atentado y resistencia a la autoridad, lesiones, amenazas y daños agravados
